jueves, 2 de junio de 2016

Visita de los Paritorios en el Hospital Universitario Reina Sofía de Córdoba

Buenas tardes familias

La entrada de hoy es un resumen de la experiencia que el pasado 4 de febrero pudimos vivir varias futuras mamás de la Asociación. Se trata de la visita a los paritorios del H.U. Reina Sofía de Córdoba. 

La visita guiada corrió a cargo de María Teresa, matrona del Centro Castilla del Pino de Córdoba y también del Hospital, una apasionada de la educación sanitaria y a la que se nota que le encanta su trabajo. Desde aquí darle las gracias nuevamente por la labor que realiza.

La educación maternal (y paternal) es clave para que el parto, el fin del deseado embarazo, sea todo lo satisfactorio que deseamos, tanto para los futuros papás como para el/la recién nacid@. Conocer el ambiente en el que transcurrirá, los medios técnicos y humanos que dispone el Hospital, o las técnicas de analgesia y anestesia que se nos ofrecen es muy importante, de forma que el parto pueda transcurrir en un ambiente lo más relajado y tranquilo posible y que facilite que sea una experiencia enriquecedora y positiva para todos.

La visita comienza en las Urgencias del Materno Infantil. María Teresa nos recibe y nos va indicando qué hacer en el momento que nos pongamos de parto. Lo primero al llegar al Hospital sería la entrega de nuestra documentación en Admisión (tarjeta sanitaria, cartilla de embarazada y Plan de Parto y Nacimiento). Allí nos darán unas pegatinas que se echan en un buzón habilitado a tal efecto y pasamos a la sala de espera. Una vez en la consulta de urgencias, se completará nuestro historial electrónico, se nos harán una serie de preguntas y valorarán si realmente estamos de parto y si así es en qué fase nos encontramos. En la consulta hay un baño y una parte dedicada a la exploración. 

Una vez valoradas, las futuras mamás pueden pasar a la tercera planta o a los monitores de urgencias, donde se valora cómo va el bebé. En este segundo caso,  y al ser  una sala en la que hay más de una mujer a la vez no se deja entrar a acompañantes. María Teresa nos explicó que no hay un tiempo mínimo en monitores, pues se deben valorar bastantes cosas y ello requiere de tiempo (latido del bebé, contracciónes, frecuencia de éstas así como la respuesta del bebé a ellas), por lo que la familia debe quedar avisada de que tardaremos en salir. 

Una vez visitada la planta de urgencias pasamos a la nueva zona que se ha habilitado en la planta tercera. Seguramente, muchos de vosotros ya sepáis que ha cambiado la organización del Materno Infantil, para dar solución a una serie de requisitos que las usuarias veníamos demandando. Ahora las futuras mamás quedan separadas de las mamás (en planta 4ª) o de las mujeres que ingresan por otros motivos (en la 5ª).

La tercera planta tiene 8 habitaciones dobles con un monitor fetal cada una donde las futuras mamás ingresan una vez que están de parto y antes de pasar a paritorio. Pueden estar acompañadas del futuro papá u otro familiar en todo momento, y aunque lo ideal sería habitación individual, como nos decía la matrona, es un avance, pues el proceso de dilatar hasta paritorio se hace acompañada sólo de una persona, en un ambiente más relajado, con nuestro baño si queremos ducharnos, usar nuestra pelota de Pilates para aliviar el dolor, etc. Las futuras mamás a las que se les provoque el parto (inducción) también vendrían a estas habitaciones. Ya no hay traslados a monitores con la consecuente incomodidad, y mientras dure el turno estaremos atendidas por la misma matrona.

De aquí pasamos a ver un paritorio. María Teresa nos enseñó la cama donde se da a luz, el box que hay entre cada dos paritorios y nos fue enseñando todo el material que hay en la habitación, explicando las formas en las que se puede parir, todo en función de si elegimos un parto natural o con epidural. 

La última parte de la visita consistió en una charla en una sala de conferencias donde nos comentó las diferentes analgesias a las que podemos optar (desde analgésicos específicos para las mujeres a las que se induce el parto o la utilización en paritorio de óxido nitroso para paliar el dolor o la anestesia epidural) y resolvió gran número de dudas, que incluso seguimos teniendo las embarazadas que no somos primerizas. Se habló de posiciones durante el parto, qué bebidas se pueden tomar o no, monitorización del bebé, alivio del dolor de forma natural o con fármacos (el uso del óxido nitroso, conocido popularmente como gas de la risa es bastante novedoso), qué hacer ante una cesárea, lactancia materna, etc.

Por cuestiones prácticas y de organización las visitas son máximo para 5 personas, pero en la sala de conferencias hay sitio para más, por lo que los papás interesados y que no puedan hacer el recorrido, sería interesante que al menos asistieran a esta última parte. 

Personalmente me encantó la experiencia, me hubiese gustado poder hacer esta visita en mi primer embarazo, porque son muchas las dudas con las que se llega y que si se saben resolver de antemano van a hacernos las experiencia más grata.
 
Agradecer nuevamente a María Teresa su profesionalidad y saber hacer y animar a los futuros padres y madres a hacer esta visita. Podéis contactar con María Teresa en el Centro Castilla del Pino de Córdoba.